Elida Vigo, Secretaria General del SACRA Misiones, en su carácter de Ministra de Acción Cooperativa, Mutual, Comercio e Integración, y en representación del Sr. Gobernador, tuvo a su cargo el discurso de homenaje al creador de nuestra bandera, en el acto oficial de Posadas, en el Barrio Itaembé Miní.
Transcribimos su mensaje que nos invita a reflexionar en un patriota que luchó por la Patria naciente, y bosquejó un programa que proponía desarrollar nuestras potencialidades, incluyendo también a las mujeres.
Señor Intendente de Posadas, apreciado compañero y amigo Joaquín Losada, señores concejales de la Ciudad de Posadas, autoridades provinciales, legisladores, autoridades eclesiásticas y de la seguridad, autoridades de las comunidades educativas presentes, estudiantes que hoy asumen el compromiso ante la enseña de la Patria: la bandera argentina.
Querido pueblo de nuestra bella Posadas, el señor Gobernador de la Provincia, Licenciado Hugo Mario Passalacqua me ha honrado esta mañana enviándome en su nombre para que lo represente y rinda homenaje al General del Ejército Argentino, Don Manuel Belgrano, destacando los aspectos más profundos de su trayectoria, vinculados a la construcción de una Patria Libre, Justa y Soberana, que es el anhelo que en la vida nos une a todos los argentinos.
La primera característica de nuestra Revolución de Mayo que se iniciara en 1810, es que se trata de una expresión en el Río de la Plata de un proceso mucho más amplio, que estalló al mismo tiempo en Méjico, Venezuela y en los demás países de la América española.
Manuel Belgrano surge en la Primera Junta como un abogado brillante y un patriota insigne, pero como toda Revolución, la de Mayo multiplicó sus funciones y lo transformó en economista, gobernante, educador y aguerrido militar, capaz de llevar la Revolución que encarnaba hasta los últimos límites territoriales de la Patria Naciente.
Al partir con su ejército rumbo al nordeste, ya que el Paraguay se resistía a los procesos de la transformación revolucionaria, en la ciudad de la Virgen del Rosario, el 20 de Junio de 1811, el General Belgrano le da a todo lo que estaba aconteciendo, el símbolo, la síntesis mítica, el color de los significados que marcaban su rumbo, el emblema que a partir de ese día nos uniría, distinguiéndonos. La bandera argentina nacía así entre ruidos de sables y fusiles, de caballerías patriotas de un improvisado ejército que crecía, a medida que los pueblos se integraban a la Revolución naciente.
Cruzó la provincia de Corrientes por el lado oeste del inmenso Iberá. Y se cuentan allí innumerables anécdotas que demuestran la ebullición social, las manifestaciones de la sangre caliente de hombres y mujeres que querían participar en la lucha por la libertad.
Al llegar a San Roque, el joven de 30 años Díaz Colodrero le pide incorporarse como voluntario al ejército patricio. Belgrano le niega esa posibilidad por tener ya demasiados años cumplidos. Díaz Colodrero le contesta: “Hacen 30 días que me presenté para ser miembro del Cabildo de mi pueblo y me negaron por ser demasiado joven. Ahora no puedo incorporarme al ejército de la Patria por ser demasiado viejo. Me pregunto: ¿qué ha pasado?” Belgrano le contesta: “Lo que ha partido por la mitad, por el medio su vida, es la Revolución”. Era la Revolución del pueblo del Río de la Plata y sus decisiones son inapelables.
El ejército continúa su marcha y en Concepción ocurre otra anécdota simbólica: Un niño de 12 años se presenta como voluntario. Belgrano le dice que de corazón lo aceptaría, pero no se lo permiten los reglamentos militares. Entonces aparece el padre del niño que le manifiesta estar impedido físicamente para acompañarlo, por lo que le solicita acepte a su hijo para que al menos pueda tocar el tambor militar. Ese niño se trató nada menos que del glorioso “Tamborcito de Tacuarí”, quien tuvo una actuación destacada convocando a las tropas a la lucha con su tambor batiente, hasta que una bala enemiga terminó con su vida en la batalla de Tacuarí.
Todas eran manifestaciones del pueblo, que empezaba a regar con su sangre los territorios en las luchas para liberarlos de todos los imperios que querían dominarnos.
Manuel Belgrano es vencido en el Paraguay. La Junta Central Revolucionaria le encomienda entonces la conducción del Ejército del Norte que había estado al mando de Castelli y que había tenido victorias y derrotas como toda guerra.
En esta campaña del Norte tenemos que destacar dos aspectos sobre los que había que construir la Patria naciente: 1°) A medida que iba pisando suelo liberado, Manuel Belgrano donaba sus sueldos para la fundación de escuelas, dejando varias de ellas funcionando. Extraño General, comparado en la historia de los ejércitos del mundo, que en medio de las batallas, se preocupaba por la educación de su pueblo. Y más extraño aún para su época, ya que se ocupó especialmente de la educación de las niñas, para que pudieran alcanzar un mismo nivel que los jóvenes varones en la instrucción educativa.
2°) Llama a todo el pueblo e incluso a las mujeres, a incorporarse a la guerra. Su antecedente fue el General Martín Miguel de Güemes. Sin distinción de sexo, de banderías políticas, profesionales o de clases sociales, esa convocatoria masiva va constituyendo una nueva entidad invisible pero invencible entre la tierra y las personas, que el pueblo empieza a denominar Patria.
Belgrano pensaba que para crear la Gran Patria de la América española había que conjugar cuatro puntos fundamentales: 1°). La posibilidad de la mayor extensión territorial. 2°). Todas las inversiones del Estado debían ser destinadas a la creación de escuelas. 3°). La participación popular sin distinciones de ninguna naturaleza, como ya dijimos. 4°). Como buen hijo del Mercantilismo dominante en la época y que aprendió en España, quiso aplicarlo en América, pensando que era necesario defender y desarrollar el mercado propio, nuestras propias potencialidades, proteger lo nuestro para crecer, porque con las victorias militares no era suficiente para alcanzar las victorias verdaderas y definitivas.
¡¡Si reflexionamos en el presente, ahora como en 1811, fíjense Uds. si no necesitamos, nuevamente un Manuel Belgrano gobernando nuestra querida Patria!!
Muchas gracias a todas y a todos. Feliz Dia de la Patria!
POSADAS, Mnes., 20 de junio de 2017.
ELIDA MARIA VIGO
Ministra de Acción Cooperativa, Mutual, Comercio e Integración